Ha entrado en vigor una importante reforma fiscal para el 2015, que modifica el régimen fiscal de los productos de ahorro, y que como novedad introduce un nuevo producto condicionado por unas ventajas fiscales, el Plan ahorro 5. Es un producto de medio plazo, 5 años, que busca unos beneficios fiscales.
El producto tiene la ventaja fiscal de que los rendimientos obtenidos por la inversión en este producto estarán exentos de tributación, para ello debe invertirse a un plazo de 5 años y en productos que ofrezcan una determinada garantía, del 85% del capital, en formato seguro, u otro tipo. La cantidad máxima a invertir es de 5.000 euros.
La principal crítica es el plazo, la duración es poca e impide de nuevo que se hagan previsiones de cara a la jubilación, y por otro lado el beneficio es mínimo. Si tenemos en cuenta que el importe máximo son 5.000 euros la rentabilidad que se podría obtener no llegara a alcanzar un 2%, lo cual supondrá unos beneficios mínimos que fiscalmente suponen un ahorro que no alcanzara los 200 euros en cinco años.
El beneficio parece insuficiente y no termina de ser la solución al problema actual de como complementar las pensiones publicas en el futuro. El único beneficiado va ser la entidad financiera o aseguradora, la novedad será al final un producto de gestión pasiva y estructurado con comisiones para su cuenta de resultados.
Fco. Iniesta López-Matencio
DPTO. GESTIÓN PATRIMONIAL GALAN CONSULTORES